No hay peor sordo que el que no quiere escuchar
Las heridas abiertas de Pasco siguen sangrando, causando muerte y tristeza en el corazón de las familias cuyos niños y niñas han sido vulnerados en un derecho fundamental, su derecho a la vida y a la salud. El distrito de Simón Bolívar, en Cerro de Pasco, forma parte del Perú, y esa herida empieza a doler a más peruanos si el gobierno persiste en cerrar sus puertas para no escuchar.
Cuanta falta nos hace el cambio en la educación peruana, tanto en el colegio como en la casa, de tal manera que aprendamos mejores formas de convivencia y relaciones sociales para fortalecer la democracia, respetando y atendiendo las necesidades de los demás, sobre todo de los más vulnerables. El educador colombiano, Eduardo Escallón Largacha, experto en educación y competencias ciudadanas nos dice que: “El interés verdadero por comprender lo que otros tienen para decir y compartir, muestra un camino para establecer relaciones sociales incluyentes en las que todas las personas cuenten, y se favorezca el libre desarrollo de la personalidad, sin más límites que los que imponen los derechos de los demás y el orden jurídico. Es la importancia del diálogo constructivo -saber oír y expresar- para fortalecer las competencias ciudadanas”.
Hoy le duele al Perú ver a los caminantes de la “marcha del sacrificio” acampando en la avenida Abancay, ver allí a niños del distrito de Simón Bolívar que presentan hasta 10 microgramos de plomo por decilitro de sangre, agravando su estado de salud, al grado de perder la capacidad de movilizarse. Ellos mismos están reclamando la atención del presidente del Perú, Ollanta Humala. Ellos piden al gobierno escuchar su voz, sus historias. Sus años de postergación y muerte. Su dolor, su tragedia. Ellos piden al gobierno escuchar que la minería de ayer y de ahora en Cerro de Pasco, no se traduce en desarrollo sino solo en crecimiento económico para que se diga que en el Perú estamos bien, ocultando que es a costa de la destrucción de vidas, de niños y niñas pasqueños.
La voz de sus autoridades
Zumel Trujillo Bravo, Alcalde del distrito de Simón Bolivar, ha explicado hasta el cansancio que esta movilización no tiene fines políticos, que solo quiere que el gobierno pueda escuchar de la voz del pueblo que la minería en Pasco significó ingreso de divisas al estado, sin considerar que la población ha resultado perjudicada por la contaminación ocasionada por estas empresas.
Por ello, el burgomaestre de Simón Bolívar pidió a los limeños, y a pasqueños residentes en la capital, a las asociaciones civiles a apoyar el reclamo que realizan. Puesto que se necesitan frazadas, carpas, víveres no perecibles, ropa y pañales para niños.
Acta de Representantes de la Marcha de Sacrificio con Entidades del Gobierno Nacional, Ante la Contaminación Ambiental Minera de Cerro de Pasco, para que el gobierno de Humala No vuelva a abandonar este tema:
Alianza Para el Progreso y su líder, César Acuña, consideran que escuchar es una de las herramientas ciudadanas más importantes para servir a quienes se representa, y es un derecho ciudadano que no se puede despreciar ni ignorar, pues los pobladores solo ejercen y defienden su derecho a la vida y a la salud de sus niños, niñas y de toda la población.
